Hoy te quiero explicar los beneficios del ejercicio físico para tener una buena salud física, mental y emocional. Y para ello, nos vamos a dar un paseo por un bosque.
En Japón, los paseos por los bosques o “baños forestales”, se llaman Shinrin-Yoku. Consiste en “absorber” el bosque con todos los sentidos, de una forma meditativa y especial.
El Shinrin-Yoku está inspirado en prácticas budistas ancestrales y en el sintoísmo, una religión nativa de Japón que se basa en la veneración de los kami o espíritus de la naturaleza.
Con el Shinrin-Yoku se beneficia nuestro sistema inmunitario.
Según estudios realizados por científicos japoneses, pasear de manera habitual por el bosque, favorece la reducción del estrés, de la hipertensión, de la depresión y de otras enfermedades. Los baños forestales también aumentan el nivel de las llamadas células NK (natural killers), un tipo de glóbulo blanco que permite combatir enfermedades. Las sustancias volátiles y no volátiles producidas por plantas y árboles (fitoncidas), se han asociado a una mejora de la actividad de las defensas del cuerpo, beneficiando así nuestro sistema inmunológico.
El bosque es un santuario, un manantial de la naturaleza, pero no es suficiente con un simple paseo entre los árboles. Has de ver, oler, oír, tocar, respirar y sentir la naturaleza.
Disfruta del Shinrin-Yoku, con familiares y amigos. Pero practicar del baño forestal de forma individual, te permitirá tener un momento íntimo y único, una conexión entre tú y la naturaleza. Combínalo con otros ejercicios, como el yoga, el tai chi, el chi kung, o la meditación, y los efectos serán exquisitos.
Las personas necesitamos un equilibrio entre el medio urbano y la tranquilidad y aire puro de los espacios naturales. Búscalos y disfrútalos, pero si no puedes ir a un bosque, visita un parque de tu ciudad y hazlo con todos los sentidos, también te será beneficioso.
¡Qué lo disfrutes!